Descripción del Pioneer SBX-N500
LA Pioneer SBX-N500 es una barra de sonido peculiar. En un mercado en ebullición donde un día sí y otro también surgen nuevos modelos con interesantes especificaciones, no habíamos visto todavía un aparato con Miracast, DLNA y Bluetooth a la vez. Siempre existe la duda fundada de que al mucho abarcar se acabe ahondando poco en cada funcionalidad. El historial de Pioneer es bueno en este sentido lo cual nos hace tener pensar que el SBX-N500 cumplirá todas nuestras expectativas.
Diseño y conexiones
Este aparato pertenece a la gama media de Pioneer. Lo primero que salta a la vista es que no viene acompañado con un
subwoofer inalámbrico dedicado. Por desgracia eso se ha dejado para el
SBX-N700. El producto que nos ocupa es pesado debido a los
drivers de gama baja integrados en el modelo. En comparación con sus competidores no sale muy bien parado en cuanto a altura se refiere. Doce centímetros. No es plano en absoluto. Por suerte incluye un repetidor IR en caso de que cause obstrucciones entre el televisor y el mando a distancia, algo que no debería acaecer a menudo de todas formas. La barra dispone de unos pies regulables y topes para instalarla en la pared. La caja en la que viene trae también un cable digital óptico. Los conectores previstos tienen sus entradas asignadas en un pequeño hueco ganado en la parte trasera de la barra. Incluye dos entradas de audio S/PDIF, una salida HDMI ARC y un puerto LAN.
Especificaciones y Rendimiento
La retahíla de especificaciones es de aúpa. Para empezar, el aparato es compatible con aplicaciones de control para iOS y Android. Cambio de modos, control de volumen, conectar a un DLNA, encontrar contenido, localizar una conexión de Wi‑Fi… Todas las operaciones que podamos necesitar prescindiendo de un mando específico. Habiendo probado ambos sistemas operativos hemos de decir que en esta ocasión Apple se lleva el gato al agua. Aunque YouTube es un servicio de reproducción ciertamente interesante, sentimos que el hecho de que sea el único accesible es un poco limitante y no muy acertado. Por lo menos su funcionamiento es a prueba de balas y permite la sincronización con el móvil para una búsqueda y selección más cómoda. La reproducción vía DLNA funcionó mejor en cualquier caso, la transmisión de datos de vídeo parece embotar el canal Wi-Fi provocando parones bastante molestos. Para tratarse de una barra de sonido sin
subwoofer dedicado, el equipo garantiza un sonido realmente bueno, repleto de matices y expansivo.
Dentro del SBX-N500 hay cuatro drivers. Dos apuntan hacia arriba y tienen unas dimensiones de algo más de seis centímetros y medio. Los otros dos, con un diámetro un centímetro mayor, se encargan del sonido descendente. En conjunto logran un ambiente sonoro amplio con especial énfasis en los bajos. Gracias a los
drivers y a su disposición los diálogos son fáciles de seguir y localizar. El resultado es, hasta cierto punto, comparable al de una barra de sonido con
subwoofer separado. En cualquier caso un resultado óptimo sólo se consigue tras toquetear un rato las opciones. Algunos de los modos DSP se presentaron como alternativas verdaderas. Muchas veces encontramos estos modos insulsos y carentes de sentido. No en esta ocasión. Aunque el modo envolvente no sustituye ni mucho menos a un 5.1 sí que aporta una presencia más allá del estéreo en su sentido más estricto. Los bajos suenan con más pegada y mucho más excitantes, es una contrariedad que en este modo surjan vibraciones y zumbidos ocasionales capaces de estropear la experiencia. El SBX-N500 cuenta también con decodificadores Dolby Digital y DTS, siendo este especialmente fructífero. Escuchar las bandas sonoras de las películas se torna todo un deleite. En una prueba de resistencia la conexión Bluetooth pasó con todos los honores. Durante diez horas de reproducción ininterrumpida de nuestras listas de reproducción almacenadas en nuestra tableta y ordenador, no sentimos ni una sola caída. La tecnología Sound Sparkle de Pioneer agració con una chispa de vivacidad los temas comprimidos.
Instalación
Para sacar el máximo provecho a este aparato es indispensable contar con un televisor con conexión HDMI ARC. La mayoría de televisores con menos de cuatro años de antigüedad cuentan con él. Además del notable incremento en calidad del sonido tiene la ventaja de poder controlar el volumen con el mando del televisor. Otra razón más para usar este conector es que muchas opciones solo son accesibles desde el menú en pantalla. No somos fans de esta decisión de diseño ya que es un incordio no poder acceder a los modos DSP de forma directa, más aún sabiendo lo útiles que son en el SBX-N500. Por otra parte los menús son intuitivos y sencillos para tratarse de una barra de sonido. El manual de instrucciones es extenso y ayuda a navegar por lo menús con mayor celeridad.
Conclusión
El Pioneer SBX-N500 es una opción a considerar seriamente. Su acabado compacto es una ventaja y un contra a la vez. La calidad del sonido se ve limitada por la inexistencia de un
subwoofer dedicado, por otro lado la sencillez del sistema es idónea para salas ya abarrotadas de otros equipos electrónicos. La presencia de entradas HDMI se agradece, pero al mismo tiempo nos entristece que Pioneer haya escondido opciones accesibles solo cuando se conecta el cable de alta definición. Nos hubiese encantado cambiar de modo desde nuestro terminal. Aunque teníamos grandes esperanzas en la barra de sonido, jamás pensamos que fuera a cubrir todas nuestras expectativas de manera tan contundente. Un modelo de Pioneer extremadamente recomendable.